Academias Nacionales y UCV juntan “su mejor voluntad creadora” suscribiendo un convenio de cooperación
La alianza busca contribuir con temas de interés para el país, como salud, desarrollo sustentable, energía, agroalimentación, innovaciones educativas y reinstitucionalización
Los presidentes de las siete Academias Nacionales y el rector de la Universidad Central de Venezuela (UCV) suscribieron un Convenio Marco de Cooperación Interinstitucional. El objeto del acuerdo es “aunar esfuerzos en la realización de diversas actividades que estimulen y consoliden su interacción constructiva y continua”.
El acto se llevó a cabo el 10 de mayo en el Aula Magna de la UCV, en la Ciudad Universitaria de Caracas. Este campus ucevista es Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) desde el año 2000.
En representación de la UCV firmó su rector, doctor Víctor Rago Albujas. Por las Academias Nacionales estamparon su rúbrica sus presidentes, doctores Horacio Biord Castillo (Academia Venezolana de la Lengua), María Elena González Deluca (Academia Nacional de la Historia), Isis Nezer de Landaeta (Academia Nacional de Medicina), Liliana López (Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales), Luciano Lupini Bianchi (Academia de Ciencias Políticas y Sociales), Leonardo Vera Azaf (Academia de Ciencias Económicas) y Rafael Isidro Quevedo Camacho (Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat).
En el convenio se establece que, durante tres años, tanto las Academias Nacionales como la UCV diseñarán y ejecutarán trabajos de investigación, gestión y divulgación en temas transversales y estratégicos. Salud, desarrollo sustentable, energía, agroalimentación, innovaciones educativas y reinstitucionalización del país son algunos de esos tópicos.
Hermandad académica
El discurso en nombre de las Academias Nacionales estuvo a cargo del doctor Eugenio Hernández-Bretón. El abogado egresado de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) se doctoró en la Universidad de Heidelberg de Alemania. Actualmente, es profesor de Derecho Internacional Privado en la UCV e Individuo de Número (Sillón 11) de la Academia de Ciencias Políticas y Sociales.
Para el doctor Hernández-Bretón, finalmente se consumó esta convocatoria con el “espíritu de ratificar un compromiso de hermandad académica. Nos hermana una misma vocación: la del conocimiento, la de la ciencia, la de la cultura, la de la incesante búsqueda de la verdad, la de servir a nuestra Patria en un entorno de libertad creativa y de expresión. En suma, nos une la pasión por un mismo ideal que es lograr un país mejor a través del conocimiento”.
Según el miembro del Instituto Hispano Luso Americano de Derecho Internacional, las Academias Nacionales y la UCV “tienen el deber ineludible de juntar esfuerzos y poner en movimiento su mejor voluntad creadora para desarrollar planes y programas que les permitan obtener frutos intelectuales, y por qué no, obtener ingresos que mejoren su deficitaria situación financiera, pero no solo para su beneficio individual, si no para beneficio de una verdadera Venezuela de progreso y de bienestar”.
Pasado común
En su alocución, el doctor Hernández-Bretón recordó que la relación entre las Academias Nacionales y la UCV es de larga data. Para demostrarlo, mencionó algunos acontecimientos históricos.
Por ejemplo, el decreto de creación de la Academia Venezolana de la Lengua lo refrendó en 1883 el doctor Aníbal Dominici, quien en 1887 se convirtió en rector de la UCV. De manera similar ocurrió con el decreto de creación de la Academia Nacional de la Historia: lo firmó en 1888 el doctor Juan Pablo Rojas Paúl, presidente de la República y abogado de la UCV.
El caso de la Academia Nacional de Medicina, fundada en 1904, es igualmente notable. Entre sus fundadores se encuentra el santo venezolano doctor José Gregorio Hernández, quien fuera profesor de la Facultad de Medicina de la UCV. Entretanto, la creación de la Academia de Ciencias Políticas y Sociales en 1915 se debió en buena medida a la visión e impulso del doctor José Gil Fortoul, profesor de Derecho Constitucional de la UCV.
Poder creativo
Con respecto a la ACFIMAN, creada en 1917 -y próxima a celebrar su aniversario número 107-, el doctor Hernández-Bretón señaló que uno de sus fundadores fue el “venezolano ilustre que concibió y logró ejecutar la idea artística de esta hermosa Ciudad Universitaria y de esta maravillosa Aula Magna que nos acoge”. Se refería al arquitecto Carlos Raúl Villanueva.
También citó a dos de los fundadores de la Academia Nacional de Ciencias Económicas en 1983, los doctores Arturo Uslar Pietri y José Joaquín González Gorrondona. Uslar Pietri y González Gorrondona crearon en 1938 la Escuela Libre de Ciencias Económicas y Sociales, precursora de la actual Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la UCV.
Finalmente, de la Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat, creada en 1998, destacó la participación fundacional del arquitecto Tomás Sanabria. Sanabria estudió Ingeniería Civil y fue docente en Ingeniería y Arquitectura en la UCV. “Fue el poder creativo de Sanabria el que llevó a las cumbres de la serranía del cerro Ávila un ícono de la ciudad de Caracas como lo es el Hotel Humboldt”.
Significación nacional
Otro hecho que evidencia la fuerte conexión entre las Academias Nacionales y la UCV es el Palacio de las Academias. El antiguo Convento de la Limpia e Inmaculada Concepción de Nuestra Señora de Caracas fue sede de la UCV por más de un siglo hasta la década de 1950, cuando se trasladó a la Ciudad Universitaria de Caracas. Hoy en día, es sede de las siete Academias Nacionales.
Sobre la presencia femenina, el doctor Hernández-Bretón explicó que la historiadora y música Lucila Luciani de Pérez Díaz fue la primera mujer en ser aceptada en una Academia, específicamente en la de Historia, en 1941. En la actualidad, tres de las Academias Nacionales son presididas por mujeres.
“Hoy más que nunca, las Academias Nacionales están involucradas en el estudio de los graves problemas nacionales y buscan aportar a la nación sus ideas y sugerencias en cada uno de sus respectivos campos de acción”, concluyó el doctor Hernández-Bretón.
“Liga intelectual”
Por su parte, el rector de la UCV Víctor Rago Albujas aseguró en su discurso que su aspiración con este convenio es “fundar una provechosa asociación, sellar un encuentro fecundo, constituir una poderosa liga intelectual”.
Para el antropólogo y lingüista, las Academias Nacionales y la UCV “son comunidades humanas consagradas a la creación intelectual”. Su misión común “las inserta en el seno mismo del cuerpo social de la nación, en el que encuentran la fuente de su legitimidad y el sentido concreto de su existencia institucional. Representan auténticos proyectos intelectuales y sociales a la vez”. Ambos atributos las conducen a un tercer fundamento: “La función de conciencia crítica del país, capaz a la vez de formular advertencias para conjurar riesgos e iluminar nortes”.
Más allá de lo intelectual y lo social, el doctor Rago precisó que comparten una base sólida de principios y valores. Entre estos resaltó los derechos humanos, democracia, pluralidad, diversidad, equidad, justicia, libertad de pensamiento y “su ejercicio crítico en el debate de ideas”.
“Deseo transmitirles a las juntas directivas que encabezan la satisfacción que nos embarga, el sentimiento de júbilo que experimentamos y la confianza que depositamos en las posibilidades que la voluntad de cooperación abren”, finalizó el rector de la UCV.
El evento culminó con la actuación especial del Orfeón Universitario de la UCV, dirigido por el maestro Raúl López. Además de interpretar el Gaudeamus Igitur y varias piezas musicales, cerró con Marcha Triunfal, el Himno de la UCV.